Director del Programa Reformas a la Justicia UC participa en la inauguración del año académico de la Facultad de Derecho USS

El pasado lunes 19 de abril, el profesor UC y Director del Programa Reformas a la Justicia, José Pedro Silva, fue invitado a participar en la actividad de inicio del año académico de la Facultad de Derecho de la Universidad San Sebastián, para comentar sobre el proceso constituyente, su vinculación con la justicia y los avances de la reforma procesal civil.

Comenzó la exposición celebrando la presentación del Proyecto de Ley de Indicaciones al Proyecto de Nuevo Código Procesal Civil anunciado por el Presidente de la República el viernes 16; este proyecto fue acompañado de una Reforma Constitucional y legal a las normas relativas al sistema de nombramiento de jueves, ambos fundamentales para que la reforma procesal civil sea una realidad.

El objetivo de la exposición del profesor Silva era establecer los puntos de convergencia y sustento de la Reforma Procesal Civil con la futura Constitución Política, proceso al que el país se verá abocado a propósito del proceso constituyente próximo a iniciarse. “Al respecto debe tenerse presente que las reglas o normas elaboradas por el Constituyente y reflejadas en un texto matriz, son obras de superestructura, cultura y experiencia, que tienen por finalidad realizar o efectivizar valores tan relevantes como la libertad, la justicia, la certeza y la igualdad, todos inherentes a la dignidad humana” afirmó.

Citando a Eduardo Couture, refirió que el proceso, como cauce de la justicia y de los valores que permite la convivencia, está intrínsecamente unido a la Constitución; esta postura del académico uruguayo marcó un punto de inflexión en la disciplina del derecho procesal, indicó, vinculándolo al derecho constitucional y reafirmando la supremacía constitucional sobre la ley procesal, con la denominada tutela constitucional del proceso -se hace necesaria una ley tutelar de las leyes de tutela, una seguridad de que el proceso no aplaste el derecho-.

Continuó desarrollando las garantías tutelares fundamentales de naturaleza procesal, que constituyen el cimiento sobre el cual se apoya la efectivización de los derechos subjetivos e intereses legítimos de las personas. En particular, se refirió a dos derechos diferentes pero interdependientes: el derecho de acceso a la justicia ante los órganos jurisdiccionales y administrativos del Estado -derecho a la acción-, y el derecho al debido proceso.

Estos dos derechos buscan ser fortalecidos con la reforma procesal civil por medio del perfeccionamiento técnico, la modernización de los procedimientos y la ampliación de la cobertura de los servicios de justicia. Reconoció que, inicialmente, las Facultades de Derecho UC y U. Chile junto al Ministerio de Justicia de la época se enfocaron únicamente en la modernización de los procedimientos con base en las garantías propias de un debido proceso del siglo XXI. Sin embargo, tras la paralización del proyecto, se percataron que la verdadera reforma habría resultado trunca si es que no se avanzaba en paralelo y con igual energía en garantizar un efectivo acceso a la justicia, lo que motivó las indicaciones recientemente presentadas.

“La reforma responde a una necesidad ciudadana y por ello el énfasis y el desafío de esta gran política pública ha consistido precisamente en ampliar la cobertura de los servicios de justicia y mejorar cualitativamente su prestación” afirmó.

Finalmente, mencionó algunas de las innovaciones que incorporan los proyectos anunciados por el Presidente de la República, entre los que se encuentran: la incorporación y promoción de la mediación como mecanismo de resolución de conflictos, acompañado de una Ley de Mediación Civil y Comercial, la creación de un procedimiento sumario simplificado sin necesidad de intervención de abogados, la modificación del recurso de casación ante la Corte Suprema y la creación de nuevos tribunales a lo largo del país.

Terminó su exposición citando a Eduardo Couture: “El derecho es, sin duda, con todas sus imperfecciones, el mejor instrumento que se ha descubierto para regular la convivencia humana. La justicia es el destino normal del derecho; el derecho apunta hacia la justicia. Junto al derecho existe el amor a la paz que es un sustituto bondadoso de la justicia. Pero envolviendo todo eso que rige la convivencia, existe la libertad sin la cual no hay justicia, ni derecho ni paz.”