El 31 de diciembre la comisión para la reforma al Código Procesal Civil entregó su propuesta al ministro Hernán Larraín. La apuesta es que en marzo el Presidente Piñera ingrese la iniciativa al Parlamento. Subasta electrónica y mediación vecinal serán parte del cambio que podría reducir un tercio los tiempos de tramitación.

Tiempos de tramitación que superan los dos años y dos meses en casos de juicios ordinarios y 30 tribunales ubicados en un edificio en el centro de Santiago, que funcionan cada uno de forma autónoma y en que el juez además debe preocuparse de labores administrativas. Así es como funciona hoy la justicia civil, aquella área del Derecho que busca resolver el conflicto de relaciones patrimoniales entre personas públicas y/o privadas.

Todos estos trámites, que en más de una ocasión confundieron a los usuarios del sistema judicial, están cerca de cambiar. Nuevos actores, procedimientos más sencillos, plazos más breves, juicios orales y el uso de un portal web nacional son parte de la reforma al Código Procesal Civil que se encuentra preparando el gobierno y que se espera sea presentado al Parlamento en marzo.

La propuesta para cambiar esta tramitación legal -la cual no tiene modificaciones desde 1903- comenzó a tomar forma en marzo de 2018, cuando el Ejecutivo creó una comisión asesora para reformar este código. El grupo lo integraron José Pedro Silva, profesor de Derecho Procesal de la UC, quien coordinó al equipo; además de los abogados Macarena Letelier, Cristián Maturana, Raúl Tavolari y Nicolás Frías.

Eso sí, este no es el primer intento que se realiza en este ámbito, pues se trata del tercer proyecto, luego del que ingresó el primer gobierno de Michelle Bachelet y la primera administración de Sebastián Piñera.

La iniciativa de los académicos, que fue entregada el 31 de diciembre al ministro de Justicia, Hernán Larraín, y se encuentra en la Secretaría General de la Presidencia, plantea que se incorporen cuatro indicaciones sustitutivas al proyecto que desde mayo de 2014 está paralizado en la Comisión de Constitución del Senado. A estas indicaciones, además, se sumará una propuesta de diseño órganico de los tribunales (ver infografía).”Hoy el tribunal civil está provisto de un juez y un secretario y funcionan prácticamente como compartimiento estanco. Lo que se quiere es conformar tribunales, no por un juez, sino por muchos jueces. Es decir, que varios magistrados apliquen justicia individualmente con un sistema de turno, sorteo”, explicó el coordinador de la comisión, José Pedro Silva.

El abogado detalló que esta nueva estructura “va a significar un aumento importante de jueces (…) Prácticamente una duplicación de la planta de magistrados”. Añadió que con esto se busca dejar “atrás el procedimiento civil que existe hoy, el que es un fundamentalmente escrito, tremendamente desconcentrado, que hace que los pleitos demoren cinco, seis o siete años en ser resueltos. Se sustituye con la instrucción de procesos orales, en que los ejes del trámite del procedimiento sean en audiencia”.

El ingreso de indicaciones

Una de las modificaciones apunta a la materia de ejecución, es decir, todo lo que dice relación al cobro de deudas.

Según explican los expertos, hoy cuando se ejecuta una deuda el magistrado cumple muchas funciones administrativas, que en rigor no requieren de la presencia de un juez. Lo que propone la comisión es separar las funciones administrativas como, por ejemplo, la liquidación del crédito, el embargo de los bienes o el remate; de lo netamente judicial. De esta forma, se busca que los jueces solo se aboquen a resolver controversias (por ejemplo, si el deudor niega la deuda) y los magistrados dejen de hacerse cargo de problemas administrativos. Así, para esto último se busca crear una Unidad de Ejecución, que quede a cargo de administrativos.

Además, se busca crear un portal web nacional de embargo online y subasta judicial electrónica de bienes inmuebles, y cada martillero público deberá crear su propia página web para la subasta de bienes muebles. Con esto se pretende, según los expertos, evitar “mafias” de subastadores que amedrentan a los postores para adjudicarse ellos las casas y después venderlas.

Otra indicación que cambiará la forma de tramitar la justicia civil será la incorporación de las figuras de mediación y procedimientos especiales para las pequeñas causas. Para esto será esencial el trabajo que realizará la nueva unidad de atención al público, que orientará a las personas sobre las alternativas que tiene para solucionar su conflicto: a través de una mediación o una demanda ante un juez.

La propuesta de los expertos define ciertas materias en conflictos entre las partes que, por obligación, deberán pasar por un proceso de mediación, es decir, en que dos personas van a poder resolver su conflicto a través de un arreglo directo y sin la necesidad de un abogado. Estas materias serán: cobro en pesos, arrendamientos e indemnizaciones de perjuicios. Con ello, se busca disminuir la carga de trabajo de los tribunales y que instituciones privadas, como universidades, o jueces de policial local puedan ayudar en la conciliación de los conflictos, lo que puede servir sobre todo para solucionar problemas vecinales.

En el caso de que no se logre la mediación, se crearán nuevos procedimientos especiales de pequeñas cuantías, que se llamarán monitoreo y simplificado, los que se resolverán en una sola audiencia por un juez civil.

Diario: La Tercera